viernes, 25 de septiembre de 2009

¿A favor o en contra del uso del velo islámico en las escuelas ?

Es el tiempo de la vuelta al colegio con la que ha surgido una gran polémica : El uso del velo.

El caso de la niña de Girona a la que se le prohibió entrar al colegio por llevar el velo nos recuerda el caso de las dos hermanas musulmanas, Alma y Lila, excluidas de un colegio parisino en octubre 2004.


Desde el principio de los años noventa, el debate sobre el uso del velo islámico ha sido en la actualidad. Las opiniones sobre la cuestión parecen convergentes así que los medios de comunicación, los intelectuales, la población parecen tener la misma opinión sobre el tema. Cabe constatar que el debate sobre el velo, en cualquier país de Europa, se ha ampliado de manera desproporcionada y se ha transformado en una real polémica.
Unos defienden el uso del velo, otros lo quieren abolir.Las reacciones fueron violentas. Muy pocas son las personas que intentan entender lo que representa el uso del velo islámico más allá de los clichés sobre el mundo musulmán y de la eventual falta de respeto a la tradición laica.En primer lugar, el problema tiene que ver con el Islam, una religión que está muy mal vista en Occidente. El musulmán representa a la vez una persona cercana y lejana en los grandes países europeos.

Es verdad que las exacciones de los fundamentalistas que se reivindican del Islam no contribuyen a dar al musulmán una buena imagen. Se ve al musulmán tan peligroso como los fundamentalistas quienes son responsables de los numerosos atentados en los países occidentales.Además, el principio de laicidad permite unas excepciones como el uso de la kipá en los institutos escolares para los niños judíos. En Bélgica, son las escuelas las que deciden de esas excepciones.

¿Cuál es la significación de la prenda hoy en día?

La conexión entre ser y parecer se hace por medio de la prenda. Ponerse un uniforme, es ponerse de lado su individualidad para identificarse a un grupo basado sobre un ideal colectivo.
Algunas ideologías fueron muy atentas al uniforme. Durante decenios de comunismo, Mao impuso a los hombres y mujeres el uso de un uniforme que no permitía exprimir su personalidad. Así, la prenda se convierte en un símbolo energético. La prenda, fuera su vocación de vestir, expresa una opinión. Dice algo o protesta contra algo. Allí se encuentra toda la dificultad. Si se considera el velo islámico o cualquier otra señal religiosa como una señal exclusivamente religiosa, pienso que nadie puede oponerse al uso. Si la joven musulmana lo lleva por convicción, nadie puede prohibirlo porque no perjudica a otro.

La declaración de los derechos humanos no puede ser tan clara cuando estipula que "Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión […].”

Todos los países democráticos suscriben a esas reglas. A partir del momento en el que el velo islámico o cualquier otra señal religiosa se convierte en una señal portadora de reivindicaciones políticas y religiosas, la situación cambia. Entonces, el uso plantea un problema y es normal prohibirlo.